El whodunit catódico goza de excelente salud
Un buen asesinato resuelto por un detective excéntrico siempre gusta
El pasado 15 de septiembre SkyShowtime por fin estrenó uno de las platos fuertes de su homóloga estadounidense Peacock para este 2023: ‘Poker face’. La serie creada por Rian Johnson y protagonizada por Natasha Lyonne es un whodunit episódico de manual que recuerda a muchos de los mejores ejemplos del subgénero en la pequeña pantalla.
Para quien no lo sepa Whodunit es la contracción de “Who has done it?” (“¿Quién lo ha hecho?” o “¿Quién ha sido?”) y es un subgénero literario de la novela policiaca que se suele centrar en la resolución por parte de un detective de un misterio, la mayoría de las veces una muerte, mediante sus dotes de deducción. Obviamente la escritora inglesa Agatha Christie es el principal referente del subgénero aunque existe bastante quorum en que este subgénero tan eminentemente británico tiene su primer antecedente en ‘Los crímenes de la calle Morgue’ del estadounidense Edgar Allan Poe.
Aunque muchas veces es muy complicado encontrar la línea divisoria entre el procedimental y el whodunit (¿Es ‘Castle’ un whodunit? ¿Y ‘El mentalista’?), lo que está claro es que la televisión ha sido muy importante para afianzar el éxito del subgénero y a día de hoy se siguen estrenando series que se adscriben a el como pueden ser ‘The Afterparty’ o la susodicha, ‘Poker Face’.
Rian Johnson, después de dos incursiones en la ciencia ficción como ‘Looper’ y ‘Los últimos Jedis’, se ha hecho de oro con su aproximación al whodunit clásico (curiosamente Johnson debutó en el cine con un hard boiled, la respuesta estadounidense al whodunit, adolescente como la muy recomendable ‘Brick’) con ‘Puñales por la espalda’ y su secuela y ahora se estrena en el mundo de las series siguiendo esta estela con un whodunit que aunque irregular es bastante disfrutable y en el que se nota el conocimiento y el amor por el género.
‘Poker Face’, aunque estrenada en streaming, es televisión de toda la vida. Obviamente hay una trama horizontal que vertebra la temporada pero, sobre todo, cada capítulo se puede catalogar como un “misterio de la semana” con sus estrellas invitadas y sus homenajes y referencias a los detectives clásicos de la televisión.
Y es que como en ‘Colombo’ nosotros los espectadores conocemos la identidad del asesino desde el comienzo del capítulo y seremos testigos como la protagonista, Charlie, utiliza sus dotes para descubrirlo. Además Charlie, como si de Jessica Fletcher en ‘Se ha escrito un crimen’ se tratara, parece perseguida por una maldición: allí donde va se produce una asesinato.
Los anteriormente comentados dotes de Charlie, la ex-estrella juvenil de sagas como ‘American Pie’ Natasha Lyonne que vive una nueva edad dorada ya rondando la cuarentena, incluyen además de una innata capacidad para meterse en líos, la capacidad de detectar si alguien miente. No es algo especialmente novedoso, ‘Mienteme’, protagonizada por Tim Roth, partía de la misma premisa aunque tiraba más por el procedimental. Si hay que buscarle un equivalente a Charlie, sería Adrian Monk, el maniático y obsesivo con el detalle protagonista de ‘Monk’, siempre logrando sacar de sus casillas a los villanos.
Pero ‘Poker Face’ no es el único whodunit que nos ha llegado a la caja tonta en este inicio de otoño. En el canal Cosmo han estrenado la primera temporada de ‘Beyond Paradise’, el spin-off de la popular ‘Crimen en el paraíso’ que sigue las andanzas del más querido de los inspectores de la serie madre, Humphrey Goodman (Kris Marshall), de vuelta a Inglaterra… pero a la zona costera, para que no tenga demasiada morriña de Saint-Marie.
Y no podía faltar el recordatorio de que la semana que viene tendremos el último capítulo de la T3 de ‘Solo asesinatos en el edificio’. La serie protagonizada por el tridente mágico Selena Gómez, Martin Short y Steve Martin no presenta un caso a la semana si no por temporada pero es un whodunit de manual: muertes enrevesadas y detectives imposibles. Y más en esta temporada donde la trama gira, en vez de entorno a un podcast, a una obra de teatro que es puro whodunit.
En definitiva, que es buena época para ser aficionado a las series, a los misteriosos asesinatos y a los detectives peculiares. A disfrutar.